Resumen
Partiendo de la base que los universos simbólicos le dan significado a las relaciones de poder que se extienden en la sociedad, podemos considerar que las metáforas con que tradicionalmente se ha representado a las mujeres son un espejo de la forma en que pensamos y actuamos las definiciones de género dominantes. Desde esta perspectiva, se analizará la forma en que los recursos escénicos permiten configurar imágenes que abren la posibilidad de desajustar estos prejuicios, considerando que históricamente el lenguaje ha sido portador de una serie de prejuicios respecto del mundo representado por lo femenino. Frente a esta situación, estos signos se presentan como una forma de darle cuerpo a una de las principales premisas de los feminismos contemporáneos: que la noción de lo femenino es solo una representación.
Este libro se propone explorar en el modo en que la representación de lo femenino se rearticula a través del lenguaje artístico, particularmente dentro del teatro feminista chileno, en el cual las imágenes y los cuerpos buscan superar la dificultad de articular un discurso que logre contrarrestar el poder de los relatos impuestos por la cultura patriarcal. Para ello, se abordarán una serie de obras teatrales chilenas que en los últimos años han intentado reconstruir nuestra noción de lo femenino, a través de una propuesta visual que activa el potencial crítico de algunos signos con que la cultura patriarcal ha sustentado las definiciones de género dominantes. Con este fin, nos apoyaremos en la teoría de la performatividad del género, expuesta por Judith Butler, concibiendo al género como un hacer que lleva aparejado un parecer, lo que se expresa estratégicamente en la forma en que los vestuarios, los cuerpos y los gestos, se disponen en escena para resignificar nuestra imagen del género femenino.